Estoy acercándome por fin al año de mi decisión… la decisión que cambio mi vida… y hace unos días comencé a preguntarme si había sido la correcta…
Este año cancele la boda de mis sueños… porque el novio no era ni remotamente el hombre que soñé (al menos que pensáramos en él como una pesadilla muy malvada)
Después, le entregue mi corazón y mi alma al hombre más maravilloso del mundo y me lo rompió (nótese que aun así creo que es hombre maravilloso y conservara ese título)...porque fue en el dolor de su partida donde aprendí más de mi y de quien soy de lo que había alguna vez aprendido y porque me enseño tantas cosas maravillosas (por esto y por MUCHAS otras razones que son más inherentes a él) .
Hice el amor como loca desenfrenada y disfrute todas y cada una de las ocasiones como si fuera la última vez… (y lo haria de nuevo).
Me enseñaron a verme a través de mis ojos (y a quitarme el velo que me habían forzado a usar) y descubrir que mi sonrisa conquista personas, que mis labios son dulces, que mi mirada delata mis pensamientos y deseos, que mi cuerpo es increible y que no está mal decir “Soy hermosa” (por 1era vez en mi vida lo hice y ahora no puedo parar)
Perdí algo irremplazable… y ese dolor me va acompañar eternamente (aunque algunos pretendan que nunca existió)
Descubrí que mis amigos… los de VERDAD, siempre van a estar ahí para ayudarme a levantarme y seguir… y que debo escucharlos cuando me advierten que “sus colitas les vibran” sobre algo o alguien.
Ame con toda el alma… aunque hoy esta tenga una cicatriz enormica que la atraviesa por el centro… pero las cicatrices pueden resultar muy útiles… no recuerdan que somos capaces de sanar a pesar de todo.
Regrese a la música… deje mi voz salir desde el fondo de mi ser… y ME ENCANTA…
Crecí en aspectos únicos y sigo haciéndolo (y no de estatura… insisto, sigo encogiéndome)
Recupere a amigos, conocí gente que “Si no hubiera nacido… Walt Disney lo hubiera creado” (frase de ERV), me reí a carcajadas (hasta sentir que las costillas iban a reventarme), llore hasta sentir que se acababan mis lagrimas (adivinen que?... siempre quedan más)
Tuve la mejor fiesta de “Resurrección” del mundo… con mis amados Festards y mi familia…
Hice mil cosas… y aun me faltan otras miles más.
Estoy acercándome por fin al año de mi decisión… la decisión que cambio mi vida… y hace unos días comencé a preguntarme si había sido la correcta…
Y ahora lo se... FUE LA MEJOR DECISION DE MI VIDA!!!
