...Rouge...
Hace unas noches me dormi temprano (algo extraño en mí, ya que soy noctambula) y entre en un sueño como historia de epoca... en color sepia, suena loco lo se, pero asi fue...
Y los hombres de mi vida estaban ahi, todos, representando diferentes papeles y yo en la encrucijada en la que existen tres hombres que causan efectos en mi, diferentes e intensos efectos...
Mi hombre teddy... que es tan dulce y tierno y ante el más minimo respingo o susto, corre a auxiliarme, al que quisiera desear con todas mis fuerzas, pero no siento eso...
Mi hombre camaleonico... al que quisiera dejar de desear, necesitar, buscar, que con una mirada hace vibrar cada fibra de mi ser, al que muero por tener en mis brazos y que arranque mi ropa sin siquiera pedir permiso.
y mi hombre jamais vecu... alguien al que estoy empezando a conocer, pero que comparte la intensidad de la vida conmigo, que me atrae por esta misma realidad de lo nuevo y desconocido, por lo que podria descubrir, vivir y experimentar...
la historia de mi sueño se desarrolla en una hacienda, donde enfundada en un maravilloso vestido con corset que marca mi silueta de una manera tan intensa, que al ver mi imagen frente al espejo me parece que este estilo de vestimenta es perfecta para mi... me contoneo frente al espejo y sonrio perversamente y camino hacia la puerta de habitación, comienzo a bajar las escaleras... y automatico siento la mirada de mi camaleonico, que se acerca a mi, pero antes de que pueda tocarme alguien toma mi mano y la besa con respeto y al mirar hacia esa dirección Teddy esta mirandome a los ojos con esa ternura absoluta que solo despierta en mi ganas de apretarle una mejilla con mi mano enfundada en un guante...
En la entrada se presenta Jamais Vecu, se presenta y se quita el sombrero en señal de respeto, puedo sentir la mirada encolerizada de el camaleonico, que ademas no espera nada para darse la vuelta y encerrarse en una habitación cercana, mientras yo me acerco e invito a pasar al caballero para una conversación intensa... pero he de confesar que me intriga que hace el encolarizado caballero de la otra habitación, así que como si no fuera importante el hombre enfrente de mi, me levanto y camino hacia una puerta que me llama casi a gritos. Sin tocar abro la puerta y lo veo mirando por una ventana, un tanto absorto en sus pensamientos, que hasta que no lo llamo por su nombre no voltea y me nota...
Y en tan solo en dos pasos se encuentra pegado a mi y me aprieta contra su cuerpo y sin previo aviso comienza a besar, de una manera intensa, apasionada casi pecaminosa (como si eso a mi me importara un poco). Con un habil movimiento de manos me levanta en sus brazos y me recuesta en un divan que está en la habitación; en cuanto sus manos comienzan a subir por mi falda dejo de concentrarme en lo que pasa,cierro los ojos y comienzo a disfrutar.
Algo cae por un movimiento de la cortina y me siento de golpe, abro los ojos y estoy en mi habitación, solo cubierta con la sabana y la respiración agitada...
No hay comentarios:
Publicar un comentario